El pasado jueves 6 de julio de 2023 estuve en el «VI Foro Cultura y Ruralidades: Continuidades-Discontinuidades. Arte, creación y ruralidades contemporáneas en Europa» asesorando a proyectos culturales en marcha o en ciernes sobre muy distintos temas según las necesidades de cada uno. Lo organizó el Ministerio de Cultura, como de costumbre, y esta vez fue en Cuenca del 4 al 7 de julio.

Los participantes tenían muchas preguntas de las más habituales cuando se pone en marcha un proyecto en el ámbito artístico y cultural: ¿Qué forma jurídica es la más adecuada para nuestro proyecto? ¿Qué derechos de propiedad intelectual debo asegurarme para poderlo poner en marcha? ¿Qué IVA debo aplicar a esto que quiero ofrecer? Pero como les suelo decir a todos mis clientes, antes de determinar la forma jurídica, es necesario que el modelo de negocio esté bien definido y delimitado y tengamos muy claro qué queremos hacer, qué ofreceremos, a quién, cuáles serán las vías de ingresos y los costes asociados, cuántos seremos, etc. de manera que luego se pueda articular el proyecto con la mejor figura jurídica.

Pero lo primero es lo primero. No nos lancemos a pensar en crear una asociación o una S.L. si no sabemos todavía cuáles van a ser nuestras fuentes de financiación y qué características tienen las ayudas o subvenciones a las que necesitemos recurrir para lanzar nuestro proyecto o durante su vida si queremos que sea sostenible. Son muchas las preguntas a las que hay que dar respuesta antes de pensar en la forma jurídica. Cuesta darle la vuelta a la forma habitual de pensar, pero es esencial hacerlo si no queremos encontrarnos con una entidad constituida que no sirve a nuestros fines.

Me lo pasé fenomenal hablando con todos ellos, escuchando sus proyectos y viendo su ilusión por que fueran una realidad. Espero que tomaran buena nota de lo que les comenté a cada uno de ellos y espero verlos pronto como proyectos tangibles y exitosos.

Autor: Eva Moraga